La novia en la puerta
El novio acompaña a su novia a la casa después de una salida.
Cuando llegan a la entrada, él, adoptando una posición ganadora, apoya una mano en la pared y le dice:
– Mi amor, ¿por qué no la chupas un ratito?
– ¿Aquí? ¡Tu estás loco!
– Dale, rapidito, no pasa nada …
– ¡No!. Puede bajar alguien de mi familia a tirar la basura o algún vecino y reconocerme.
– Pero es un ratito nada más, a esta hora no viene nadie.
– Que no hombre, que si bajan a tirar la basura …
– Dale, si a ti te gusta, una chupadita nada más tía …
– ¡No! Que pueden bajar ….
– Dale, no seas así ….
– He dicho que no, que no y que no.
– Venga, si ahí agachada no te va a ver nadie, tonta.
– ¡¡¡¡NO!!!
En ese momento aparece la hermana de la chica, en camisón, toda despeinada y le dice:
• Dice papa que ya hemos tirado la basura, así que, que se la chupes de una vez y si no, que se la chupe yo, y si no, dice que baja él y se la chupa, pero, por favor, que levante la mano del puto telefonillo que son las tres de la mañana, ¡joder!